Hace 15 años, Indira, con tan solo 23 años de edad fue detectada con un tumor cerebral benigno de células gigantes en medio de un embarazo de cinco meses de gestación.
El escenario era crítico, ya que las hormonas del embarazo hacían que el tumor creciera de forma muy rápida y ante esta situación los médicos evaluaban si salvaban la vida de ella o la del bebé. Indira decidió que los médicos velaran por salvar primero la vida de su hijo.
“La decisión fue muy difícil, me sentí entre la espada y la pared. Los doctores me pidieron una respuesta rápida. Después de haber tenido la oportunidad de ver a mi hijo en las imágenes del ultrasonido no iba a permitir que terminarán con su vida, cuando no se sabía lo que iba a pasar con la mía”, recordó Indira.
Indira tuvo que ser sometida a una operación por la nariz para disminuir la presión en sus ojos. Pues el tumor oprimía sus nervios ópticos.
“Luego de la descompresión nasal, pasaron 3 meses para poder hacerme la cesárea. Fueron meses de mucho dolor y sufrimiento, pero pensar en el nacimiento de mi hijo menor, fue uno de los motivos que me ayudaron a luchar por mi y tomar conciencia para poder adaptarme a los nuevos cambios que venían”, contó Indira.
Luego de un milagro, el niño nació a los 8 meses de gestación, los médicos lograron cumplir con el deseo de aquella joven madre. Sin embargo, Indira tuvo que ser intervenida de emergencia para poder salvar su vida.
Después de 12 horas de operación, los especialistas pudieron sustraer únicamente un 30% del tumor. El pronóstico después de la cirugía era incierto. Indira podía quedar con sus capacidades físicas disminuidas, perder el habla, dejar de ver o incluso morir.
“Al principio fue muy triste y difícil el cambio, porque debía adaptarme a un mundo totalmente desconocido, ya que de ser una persona que veía todo lo que estaba a su alrededor y podía realizar las cosas de manera independiente, ahora estaba en una posición en que debía aprender cómo desenvolverme”, dijo Indira.
La situación que enfrentó Indira la hizo entender que la vida es muy corta y que hay que aprovechar cada instante, cada oportunidad y vivir cada día como si fuera el último.
Un milagro, una nueva vida
Ya no podía ver nada, Indira perdió por completo la visión… ¡pero estaba viva!
Para poder eliminar el resto del tumor por completo, fue sometida a varias sesiones de radioterapia.
Gracias al apoyo de sus padres y de su familia Indira salió adelante, aprendiendo de la nueva oportunidad de vida que Dios le daba. Comenzó recibiendo clases en el Centro Nacional de Educación Hellen Keller, institución especializada para las personas con discapacidad visual. Ahí reforzó y aprendió cosas que antes hacia con su vista.
“Debemos entender que no hay ningún impedimento para que logremos alcanzar nuestros sueños, muchas de las cosas que yo realizó aprendí hacerlas cuando veía, y cuando pasó todo esto pensé: ¿por qué no intentarlo de nuevo? Si no hay ningún límite solo el que ponemos en nuestra mente”, dijo Indira.
Con su testimonio Indira deja un mensaje claro a las personas que no dejen de luchar todos los días, valorar la salud, la familia, los dones y talentos.
“Agradezco muchísimo a todos los que siempre me han apoyado y sobre todo a mis dos grandes tesoros: Gabriel y Santiago, que son mis motores de vida para seguir siempre adelante”, expresó Indira.
Un sueño emprendedor
A través de su historia de vida, Indira logra´diseñar collares, pulseras, aretes y hasta ha elaborado pinturas, con las que ha participado en el Festival Estudiantil de las Artes (FEA). Todos sus diseños son creados en su mente y hechos realidad a través de sus manos. Por eso se dice que son “Accesorios hechos con los ojos del corazón”.
“Esto ha significado para mi una nueva oportunidad de vida, hubo mucho temor, frustración, al principio, pero poco a poco, se va saliendo adelante”, manifestó Indira.
Esta valiente y fuerte mujer, llena de talentos invita a las personas para que conozcan su emprendimiento que es realizado con amor y mucho orgullo.
“Nunca permitan que alguien les imponga una barrera para alcanzar sus sueños y metas ni dejemos que el miedo y la frustración estén presentes cuando queremos intentar hacer algo. Confiemos y tengamos la seguridad en nosotros mismos de que podemos conseguir lo que nos proponemos”, finalizó Indira.
Quienes deseen apoyar a Indira y conocer más del trabajo de esta mujer emprendedora puede hacerlo a través de sus redes sociales:
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Instagram: regal_artecr
O bien, contactarse a través del Whatapp: 8334-7060