Para este próximo 6 de febrero, los 19 centros penitenciarios del país contarán con 27 mesas de votación para las 8. 594 personas privadas de libertad.
El Complejo Occidente agrupa al mayor número de personas empadronadas: 41,8%, pero de igual forma, se abrirán urnas en Pérez Zeledón, Liberia, San Carlos, Puntarenas, Limón, Cartago, Heredia y Pococí.
Los otros centros penitenciarios josefinos, el CAI Vilma Curling (Desamparados) y el CAI San José (San Sebastián), también contarán con mesas electorales, todo como parte del trabajo conjunto que desarrolla el Ministerio de Justicia y Paz y el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE).
“La preparación del sistema penitenciario abarca el antes, durante y después de las elecciones en lo que respecta al ingreso de los partidos para distribuir información, la presencia de observadores internacionales el propio día y el manejo del material electoral, posteriormente”, dijo la ministra Fiorella Salazar.
Las urnas, al igual que en el resto del país, abrirán a las 6 a. m. Cada mesa contará con un fiscal titular y un suplente, dos auxiliares electorales, encargados de centro de votación y fiscales generales.
Los votantes deben cumplir con los protocolos sanitarios establecidos en el Lineamiento Nacional para la Celebración de la Elección Nacional en el marco de la Emergencia Sanitaria por Covid-19.
En el caso de las personas aisladas por ser casos positivos o sospechosos, cada centro establecerá un horario especial para que ejerzan su derecho. Una vez cumplido, el recinto debe ser sometido a la debida desinfección para continuar con el proceso.
“Las elecciones nacionales son una de esas fiestas patrias en las que más evidente se hace que la democracia nos incluye a todos y todas, dentro o fuera de los centros penitenciarios, por lo que queremos la población penal se sienta convocada como parte de este país y de este momento histórico. La inclusión social es una poderosa estrategia de formación de identidad y de prevención de la violencia”, concluyó la ministra de Justicia y Paz.
En las elecciones de 2018, el abstencionismo en centros penitenciarios fue de 67,4%.