El Presidente de la República, expresó que él prometió hacer lo correcto con una mano en la biblia y por eso separó a la exministra de Cultura, Nayuribe Guadamuz, y el comisionado de Inclusión Social, Rodrigo Sossa al declarar de interés cultural la “Marcha de la Diversidad” sin antes consultarle a él esa decisión.
“Se fueron a declarar la marcha de interés cultural sin consultarme, sobre un tema que es polémico en Costa Rica, independientemente de cualquier ángulo que usted lo vea, y no se dio la discusión de cuál es el valor de esa marcha”, aseveró.
El Presidente, señaló que a pesar de las situaciones se les respetó la marcha el fin de semana pasado, y que el con quien tiene que estar en paz es con Dios y con el sueño, que será Dios quien lo juzgue después.
“Se les permitió marchar pacíficamente, la policía no los molestó y gracias a Dios no hubo disturbios. Mi decisión fue que se fueron sin consultarme sobre un tema polémico ante la duda ordené anular la declaratoria. No se dejen engañar, no es nada contra ustedes”, declaró.
El Presidente indicó que si a los participantes en la marcha les incomodó su reacción, es algo respetable, pero no puede vivir con el temor del que dirán.
“Si yo viviera con ese temor, ¡uy me van a golpear!, dirán que soy un homofóbico, entonces ¿Para qué me metí a la cocina si no aguanto el calor?”, expresó.
Ante los despidos, la comunidad LGTB organizó una marcha contra el Presidente en Casa Presidencial pero solo llegaron aproximadamente 30 personas a marchar.